Este año en Colombia se han desarrollado dos elecciones, las de congreso y
la primera vuelta de la contienda presidencial, este domingo por tercera y
última vez salimos a votar la segunda vuelta. De una ves aclaro que no quiero
argumentar por quién deben votar este domingo. Para ver una opinión así, lean el
artículo del Sr. Oscar Aranzazu. Aquí trato de esgrimir las graves implicaciones
que tiene el abstencionismo para el municipio.
Los más de 21.000 sevillanos que no han votado este año deben repensar su
posición ante el voto, y ante el proceso democrático en general. Se deben
involucrar e informarse, indagar y hacer preguntas relevantes a su
circunstancia y a la de sus vecinos, para que finalmente puedan tomar una
decisión y ejercer el derecho (y responsabilidad) de participar en el proceso
democrático, por imperfecto que sea. Les recomiendo este corto video que
ilustra el problema del abstencionismo, se llama Votar no vale huevo. Lo recomiendo especialmente a aquellos
“apolíticos” que se preguntan, ¿para qué votar? ¿Qué diferencia hace un voto?
Les aseguro que en Sevilla aplica el argumento del video.
Al comparar las dos elecciones desarrolladas hasta hoy se pueden
identificar algunos patrones de voto en la población sevillana, pero el eje
trasversal a todas es indudablemente la poca participación. Las campañas
electorales nacionales normalmente se enfocan donde hay electorados masivos, en
los grandes distritos como Bogotá, que tiene un potencial electoral de 5
millones de votos; Medellín con sus 4 millones de sufragantes; o Cali con un
electorado de millón y medio. No van detrás de los votos en pequeños pueblos
como el nuestro.
Un senador se elige por una constituyente nacional y representan al país
entero, así como el presidente. Un senador se elige con un promedio de 100.000
votos y un presidente con 7.000.000. Un representante a la cámara, por el otro
lado, se elige por una constituyente más pequeña y rurales, donde entran a
jugar municipios como Sevilla, y desarrollan sus campañas con mucho folclor.
Para dar un ejemplo, en las elecciones de marzo ciertos partidos decidieron
flagrantemente violar el código electoral y mandar testigos con insignias
publicitarias a los puestos de votación. Las campañas repartieron tamales,
camisetas, banderitas, dinero, gasolina, transporte, e indicaciones sobre como
votar. Hasta los observadores de la MOE comieron tamales. En Sevilla se vio el
desespero por movilizar votos para las elecciones de congreso.
Sevilla es un municipio que en el pasado, no solo era líder regional, sino
que también elegía hombres a ambas cámaras legislativas de la nación, pero este
año, como bien lo expresa Elciudadanoenlared, el pueblo se rajó. Ni Juan Carlos Martínez, Fernando Forero o Jair Zapata,
los únicos candidatos con lazos concretos en el pueblo[i], no fueron elegidos al congreso que se instalará
el próximo 7 de agosto. Es desafortunado que ninguno saliera elegido, pues bien
o mal, antes el pueblo contaba con representación en Bogotá, y ahora quedamos
de nuevo aislados del tejemaneje político nacional.
Este aislamiento se empieza a notar con la primera vuelta de elecciones
presidenciales el pasado 25 de mayo. Para las elecciones de congreso salieron a
votar 2000 ciudadanos más que en las presidenciales. El clima electoral estaba
tranquilo en el pueblo, no se veían buses trashumantes ni taxis llevando
votantes a los puestos, tampoco se vieron las sedes políticas repartiendo
información sobre cómo votar, ni tamales para saber por quien votar. Todo el
proceso transcurre sin ningún contratiempo. Propongo que la tranquilidad en las
calles y la poca votación, indica que Sevilla no es un pueblo donde los
partidos nacionales quieren invertir su tiempo ni sus recursos.
Y no se les puede culpar, pues el patrón electoral en el municipio es
deprimente. De acuerdo a los números de la Registraduría Nacional, de 36.000
personas registradas para votar en el municipio, solamente 15.300 se tomaron la
molestia de ir a las urnas para las elecciones legislativas, y hace tres
semanas, las campañas presidenciales en Sevilla solo lograron movilizar 13.300
votos. Desafortunadamente, las campañas presidenciales de Santos y Zuluaga ni
tamales han querido brindarle al pueblo, pues apenas 6 vallas se observaron en
las calles del centro, la mayoría del candidato del Puro Centro Democrático[ii]. El caso es que nada más se vieron (y aún se ven)
unas cuantas vallas en comparación con toda la publicidad generada para las
elecciones a la Cámara de Representantes. (Aquí vale anotar que estas vallas siguen expuestas públicamente y en contravía
de las normas promulgadas por el Consejo Nacional Electoral. Este tipo de
propaganda sólo puede hacerse durante los tres meses antes de las elecciones y
es prohibida todo tipo de publicidad el día de elecciones.)
Todo esto indica que las campañas nacionales prefieren invertir en otros
municipios con grandes electorados y alta participación, como por ejemplo
Roldanillo, que movilizó más de 50% de sus votantes este año. Reitero, en Sevilla, de 36,000 ciudadanos
registrados para votar solamente el 40% salen a las urnas. Son pocos los que se
toman el tiempo de ir a votar, y entre estos, un gran porcentaje no saben cómo
votar. Nada más miremos los números que publica la registraduría. Entre dieciséis y dieciocho por ciento de esos
ciudadanos sevillanos que salieron a votar en marzo para elegir sus
representantes al congreso perdieron la ida. Sus votos no contaron por nulos y
no marcados. Para las elecciones presidenciales, entre otras cosas por el
diseño más amigable del tarjetón, ese número de votos inválidos baja a cinco
por ciento, o 683 sufragios.
En conclusión, sumamos la
indiferencia de los políticos nacionales hacia el electorado sevillano por un
lado, y el abstencionismo masivo por el otro, quedamos con una triste realidad,
estamos destinados al frío aislamiento de las esferas políticas nacionales. Los
abuelos dicen que eran otros tiempos cuando el gamonal del pueblo movilizaba 30
mil votos con una población inferior a la que tenemos ahora, así fuera
repartiendo tamales; era otra época cuando hijos de Sevilla como Juan Fernando
Botero Ochoa y Carlos Ossa Escobar participaban en los altos círculos de poder
nacional. Estemos de acuerdo o no con el trabajo de estos personajes, no
podemos negar que eran tiempos cuando el nombre de Sevilla aun resonaba en los
corredores del poder.
A mi generación le tocó otra época. Políticamente estamos en el olvido,
quedamos en las manos de algunos burócratas departamentales en Cali y en cabeza
de los prohombres en la Alcaldía. Menos mal seguimos sobresaliendo por nuestra
música, café y hermosos paisajes naturales y humanos, si no fuera por el calor
cálido de este pueblo, el aroma que producen nuestro café y la identidad socio-musical[iii] creada con el Festival Bandola, Sevilla estaría
tan marginado como cualquier otro municipio de última categoría.
Cierro, pidiendo de nuevo, suplicando, que salgan a votar, participen en el
proceso. Si la política les parece un juego sucio, pongan su parte para
limpiarlo. No dejen que su inconformismo político se vuelva letargo social.
Solo se pueden quejar los que participan, los demás críticos solo se llenan la
boca de pura bazofia. Hablen con sus amigos y con sus familias, discutan los
temas más importantes para Uds., y tomen una decisión. Participen.
Abajo les dejo unas gráficas que detallan los patrones de votación en
Sevilla en las tres contiendas electorales, Cámara, Senado y primera vuelta de
Presidenciales.
Elecciones Presidenciales -
En Sevilla votamos de la siguiente manera para la primera vuelta
presidencial: 3.866 por Zuluaga; 3.175 por Santos; 2.225 por Ramírez; 1.841 por
Peñalosa y 843 por Clara López. El voto en blanco contó con 717 ciudadanos
inconformes. Los votos invalidados no superan ninguno de las otras opciones, ni
la del voto en blanco. Cosa que me alegra. Pero no me alegra que para estas
elecciones tuviéramos una tasa de abstención de casi 64 por ciento, y en las de
marzo la tasa es más baja, pero no por mucho.
Elecciones Legislativas - Senado
De los 15.346 personas que salieron a las urnas, 2.214 de ellas votaron a
favor de la lista cerrada por del Puro Centro Democrático; 2.118 sufragios se
depositaron para el partido Conservador, mayoritariamente por el candidato
Javier Mauricio Delgado; MIRA con su lista cerrada moviliza 1.474 votos; y el
prestigiado PIN u Opción Ciudadana saca 538, gran parte de estos para Carlos
Arturo Quintero. Estos cuatro movimientos o partidos todos coinciden de algún
modo por su conservadurismo y están a la derecha del espectro político. Hoy se
unen detrás de la misma bandera uribista y su candidato Iván Zuluaga.
Por el otro lado, el centro neoliberal en Sevilla se mantiene firme con
2.045 votos de la Unidad Nacional, la mitad de estos para el Senador Barreras
Montealegre; el partido Liberal saca 1.324 sufragios, de los cual una tercia
parte fueron para Luis Fernando Velasco; y Carlos Fernando Motoa recibe una
tercera parte de los 1.016 votos de Cambio Radical. En total son un poco más de
cuatro mil votos neoliberales.
También quedan en el municipio los ciudadanos solidarios con los Verdes y
el Polo, ambos partidos con menos de 500 sufragios contados. Por último,
resaltamos la sorprendente manifestación de los Sevillanos inconformes con los
candidatos al Senado. Un total de 777 sevillanos declaran su protesta cívica
con el voto en blanco. Desafortunadamente, en las contiendas de Senado ningún
partido o movimiento político obtiene más votos que el conjunto de sufragios
que fueron invalidados. 2.721 personas perdieron la ida al puesto de
votación porque su voto no se contó, por nulo o no marcado.
Elecciones Legislativas – Cámara de Representantes
Mientras la línea conservadora acumula la mayoría de votos sevillanos para
el Senado, lo contrario sucede con la contienda a la cámara baja. Juan Carlos
Martínez recoge la mayor votación para la Unidad Nacional con 1179; Griselda
Janeth Restrepo saca casi la mitad de los votos a favor del Partido Liberal y
lo mismo sucede con José Luis Pérez Oyuelo de Cambio Radical. Fernando Forero
Cruz le pone 522 votos al Partido Verde. El Polo no tuvo votación sobresaliente
para la Cámara de Representantes, y ni hablar de la Unión Patriótica con sus 94
votos.
Concerniente a la votación para la cámara baja, la línea conservadora en
Sevilla la lidera el MIRA con los 1737 votos de Jair Zapata y el Partido
Conservador con los 596 votos de Álvaro López Gil. A estos dos partidos les
sigue la lista cerrada del Puro Centro Democrático. Y en torno a Opción
Ciudadana es de resaltar que en Sevilla Fabián Andrés Gallego obtuvo la mayoría
de sus 355 votos. Por otro lado, parece que los inconformes con las
candidaturas al Senado no estaban tan molestos con la variedad de candidatos a
la Cámara, pues el voto en blanco obtuvo 62 votos mientras para Senado obtuvo
777. Finalmente, resalto la gran cantidad de votos invalidados por nulos o no
marcados, 2.423 personas perdieron su caminada a los puestos de votación y
desperdiciaron su derecho a votar.
Imágenes y texto, Andrés Ceballos
Video tomado de redes sociales
[i] Decir
lazos concretos es controvertible al hablar de política electoral, ya que
ostentar lazos de trabajo social con el pueblo es muy diferente al hecho que sus familias y amistades sean de
Sevilla.
[ii] Yo sé que
los uribistas ya se abanderan bajo el nombre de Centro Democrático, pero me
parece mas congruente a su ideología con el 'Puro'.
[iii] Juan
Rogelio Ramírez desarrolla este concepto de identidad musical en Identidades
sociomusicales rurales?
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