¿En qué quedo los buenos oficios de Brasil, México y Colombia, respecto a la situación electoral en Venezuela?
¡Todo se enfrió! A ninguna de las partes le pareció atractivo el llamado a
repetir elecciones. Aunque se empleen todos los eufemismos que exige la
diplomacia, el Chavismo no aceptará unas nuevas elecciones, ni establecerá una
réplica del nefasto Frente Nacional, que, en el pasado, cerró todos los
espacios de participación democrática en Colombia y nos sumió en un infame
bipartidismo que duró 16 años, (1958 - 1974). A raíz de la negativa a lo
propuesto por los tres países de la región, la situación entra en un estado
Criogénico, que obviamente beneficia al gobierno Maduro.
La
propuesta de realizar nuevas elecciones no cayó bien, pues sería reconocer tajantemente
que hubo irregularidades electorales y, el gobierno Chavista no lo va a
aceptar. Igualmente, a la llamada oposición liderada por María Corina Machado, tampoco les gusto la idea,
pues se piensa que, en una nueva elección el fraude que pregonan con
vehemencia, esta vez, sería perfeccionado y quirúrgicamente llevado a cabo.
Brasil,
México y Colombia, han quedado sin
espacio para maniobrar y AMLO ha tomado distancia de la situación: México
propugna por la no injerencia y el respeto por la soberanía. Gustavo Petro ha
optado por un evidente mutismo contrario a su espíritu locuaz. Lula endurece su
postura: ha pedido nuevas elecciones o en su defecto presentar las actas de votación.
Así
las cosas, todos pierden: Brasil, Colombia y México han fracasado como
mediadores. Maduro "el bruto", "el camionero", viejo zorro
en política, gana con todo lo anterior ¡Siempre gana Maduro! Su astucia le
indica que, con el enfriamiento de la situación, poco a poco las cosas se van
disipando, se van normalizando, todo entra en una etapa de resignación, la
temperatura llega a cero, el desgaste de las protestas es insoslayable y de
nuevo queda instalado en el trono por 6 años más.
A
estas alturas la información que nos llega, no deja duda imaginar que la
estrategia mediática de la derecha venezolana y sus adláteres patrocinadores,
fue apostarle al desconocimiento de los resultados antes, durante y después de
la gesta electoral. Con foráneas y
avanzadas ayudas tecnológicas, fue el propósito sabotear uno de los sistemas de
voto electrónico mejor dotados del mundo. Y frente a lo anterior, Brasil más
cercano a la posición de Chile, y Colombia, más cercano a la posición de México,
le hicieron el juego a la nefaria derecha, exigiendo pruebas y desconociendo el
saboteo Electrónico. México, mantiene una posición consistente con su
pensamiento histórico: fue el único país lucido en reclamar todo el tiempo,
respeto por la autonomía, la no injerencia y la autodeterminación de los
pueblos.
Independientemente
de la opinión que nos genera la propaganda de derecha, las movilizaciones
demuestran que todavía muchos venezolanos respaldan al Chavismo. La migración
es el resultado del bloqueo a Venezuela, igualmente afecta el desempeño económico
de cualquier gobierno. Si se quiere un juego limpio, se debería empezar por
acabar con el unilateral, nefasto y perverso bloqueo. En esto existe mucha hipocresía
y cinismo: los que arbitrariamente cambiaron "el articulito" para
relegirse en Colombia, hoy se rasgan hipócritamente las vestiduras y el apoyo incondicional
del gobierno americano al genocida Netanyahu, lo inhabilita moralmente para
hablar de tiranía.
¿Qué
puede hacer Colombia a corto plazo? Nuestro país no puede entrar en el juego
que nos plantea la corrupta y mafiosa ultraderecha colombiana, que desea de
nuevo una sempiterna enemistad con Venezuela, para usufructuar réditos políticos
y electorales. La hirsuta derecha desea un rompimiento de relaciones con el país
hermano, desean con ardor un cierre de nuevo de la frontera y sueñan con que
los procesos de "La Paz Total" se rompan.
La
trampa esta tendida. El gobierno Petro no debe caer en esa ingenuidad. Es una
trampa que le tienden al Progresismo para esperar que caiga en ella. Pienso que
el gobierno de Colombia, no debe participar en una injerencia indebida y no
inmiscuirse en asuntos internos del país vecino. La libre autodeterminación de
los pueblos debe ser el mantra. Se debe imponer el respeto por su soberanía y
que la solución venga de los propios venezolanos.
Seria
necio y recalcitrante, no entender que la situación económica en Venezuela no
es la mejor. ¿Aquí en Colombia es la mejor? Es algo lógico: si usted aplica
esas sanciones, ningún gobierno puede provocar buenos resultados. En Colombia
la perversa derecha construye falsedades contra Gustavo Petro para q su
gobierno fracase, para luego ellos entrar con su lógica militarista y mantener
sumido al pueblo. Lo anterior lo entendemos unos pocos. En general la gente la
mantienen alienada defendiendo a los que los someten y tradicionalmente los
oprimen.
Para
mí, el resultado será lo que defina el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de
Venezuela, como país soberano, respetando sus instituciones y teniendo en
cuenta el saboteo cibernético que hubo y, no atendiendo las necedades dirigidas
a complacer la Fascista derecha internacional.
Germán Peña Córdoba
Arquitecto-UNIVALLE