Por: Edgar Alzate Díaz.
En
Sevilla hay una producción de poesía de muy buena calidad. Los presentes
artículos acerca de los poetas y poetisas de Sevilla, Valle, traen poemas
escritos con sus sentimientos y palabras, elaborados desde nuestras calles y
paisajes y que les entrego en estos artículos para que no se pierdan de la
memoria del pueblo sevillano. Poetas hombres y mujeres con una calidad estética nada diferente a otras
latitudes. Métricas, metáforas, sonetos y otras técnicas de la poesía
elaboradas de manera magistral y profesional.
Los poemas
reseñados no son sino una mínima parte de la producción poética de los artistas
que se presentan en estos artículos. Con estos se quiere rescatar esta memoria,
hacerla conocer de la ciudadanía y que los incite a leer a estos poetas.
En la gama de
poetas de Sevilla, entre mujeres y hombres, se destacan las poetisas por su
calidad y por su número. De seis poetas que voy a reseñar en los dos artículos
que entrego acerca de los poetas sevillanos, cuatro son mujeres y dos son
hombres. Quedan faltando algunos como Hilda Arias, William Quintero. El poeta
Guillermo Sepúlveda de renombre internacional que vivió en Sevilla durante
treinta años y quien murió en el 2.016, suficiente tiempo para colocarlo en el
panteón de la poesía sevillana. Otro poeta por difundir es Oscar Peláez Peña y
con seguridad se quedan varios por nombrar.
En el presente
artículo voy a destacar la poesía de Magnolia
Gutiérrez, una poetisa sevillana con un verso enmarcado en el sentimiento y
la sensualidad de las relaciones humanas. Para ella la palabra es transparencia
y energía. Veamos un poema de Magnolia Gutiérrez:
SOMBRA
Soy tu dueña / y, aun así, me huyes. / Eres mi
esclava / y, aun así, te sublevas. /Ya no deseas darme tu protección, / ni
menos ser mi vigía / Te cuesta hasta brotar de mi / porque de mí, no fluye luz.
/ Esta carencia de luminosidad en mí/ No permite que conserves en ti, /tú
esencia / Y menos, / que tengas la fuerza y el deseo / de proyectar mi
existencia.
Su verso se desplaza en el amor y el deseo, estos versos construyen
sentimientos entre dos seres. El siguiente poema incorpora el dolor y el deseo
que se da en toda existencia humana.
Este hermoso poema de Magnolia nos muestra que en nuestra tierra
descollan los versos elaborados con el sentimiento del amor y el deseo y el
sufrimiento aparejado en el amor.
NOSTALGIA
Un dolor lacerante y asfixiante, / es
la ausencia delirante de tus besos / Que por ser de amores / verdaderos, / se
extrañan con pasión y con deseo. / No importa la distancia de los hechos, / en
que se consumaron esos besos. / Lo que cuenta es revivirlos como eternos, así
hayan sido tan fugaces como el viento.
Las palabras que muestran el desgarramiento interno,
vertido en lágrimas que llegan como un desahogo para renacer. Es la tragedia
incorporada en la fisiología para que, mediante las lágrimas como un torrente,
se produzca fluidez para el renacimiento interior. El siguiente poema muestra
las cualidades literarias de esta poeta de versos concisos.
LLANTO
Brotan en mí, / las aguas de mi interior, / convergen,
en ríos de lágrimas. / Fluyen, buscando salidas / formando cascadas / vertidas
todas, / del manantial de mis emociones. / Brotan explosivas / signadas y
marcadas / con el dolor recogido de mis entrañas. / Fluyen, explorando rutas
extrañas / derramando aguas de tormentos / huyendo en maratón / pavorosas de aliento. / Bañan de pureza
mi tez, / liberando sensatez / sus lágrimas mi energía, / soltando
sentimientos / pausando llantos / de alivio y descanso / a mi alma frágil de
sutil encanto. / Llanto, que limpia y restaura / mi espíritu herido, / con
vendajes sueltos de curas cubiertas, / aún exhumadas / para evocarme / que
estarán dormidas / hasta que mis recuerdos / las despierten siempre. / Gestando así,
emociones / renovadas y más fuertes /que vuelvan e irriguen con más ímpetu,
mi faz, mi vida, mi suerte y mi muerte.
Otro poeta muy reconocido en el ámbito
local es Alberto Parra Arcila,
nacido en Sevilla Valle el 2 de noviembre de 1.931 y quien murió en la
carretera en Fusagasugá (Cundinamarca) el 27 de abril de 1.957. Tenía 25 años y
estudiaba Derecho en la Universidad Nacional. En este año de 2.017, cumple 60
años de muerto y cumpliría 85 años de edad si estuviera vivo.
Un hombre muy joven cuando escribió su
poesía y sus relatos en prosa. Enamorado de la cultura árabe escribió intensos
y bellos poemas acerca de princesas, jeques, desiertos y oasis. Escribió poesía
alegre, jocosa y satírica, así como poemas místicos y otros muy analíticos
acerca de las situaciones y personajes de la vida. Murió en una edad en la que
mueren muchos jóvenes geniales como el escritor caleño Andrés Caicedo, el
cantante de Rock Jim Morrison, las cantantes Janis Joplin, Amy Winehouse y
muchos más.
Una muestra de un poema premonitorio de
su muerte:
Y Llegará la Hora
Y llegará la hora, la hora de la muerte. / ¿Las seis de
la mañana? / Quizá, si tengo suerte. /
La pálida invencible, con voz ronca y huecosa, / con esa
voz que tienen las cosas que se han muerto / se acercará despacio / La cera de
los cirios se encontrará llorosa / y hasta el reloj de hierro estará yerto /
Y, paso muy despacio, me llamará: “Despierta, / despierta
perezoso, que ya es hora del viaje” / y yo despertaré / y le abriré la puerta.
/………..
Y como él lo dijo acerca de su personalidad y sus deseos:
“Fui un citarista que nací en Arabia, /bajo el
influjo grandioso del desierto / me dio la raza su alma que no agravia, / la
palma lo sutil de su concierto / y el oasis, la linfa de su savia. / Fui un
citarista, que nací en Arabia.”
De sus muchos buenos poemas, el siguiente tiene la
profundidad del amor y la intensidad del erotismo.
MUJER: YO VOY A TI
Mujer: Yo voy a ti / como quien va hacia el
agua. /Para beberte la boca con la mía / y para que en tu efímero cuerpo de
piragua / halle un eco de sangre mi agonía.
Yo sé que eres de arena y
medio día / y que morirán de sed mis manos tibias / en tu cálida piel; buscando
en vano / la fuente febril de tu lascivia / y tu placer insano.
Si tú eres nívea... / yo
quiero verte impura y fecundada. / Que mi vida golpee contra la tuya / como una
canción enamorada / contra un silencio... /aunque la voz y el silencio se
destruyan.
Mujer de arena y medio día /
y de armonioso cuerpo de piragua. / Me allego a ti con mi sed y mi agonía /
Como quien llega al agua.
Conocimos a este poeta en los años 1970 en el
Colegio General Santander gracias al interés con el que el profesor de
literatura Eduardo Trujillo, con su voz grave teatral y su mano que rosaba su
barba nos recitaba a nuestro poeta sevillano. Alberto Parra Arcila fue un
estudiante comprometido con el cambio en sus años de universidad pues luchó
contra la dictadura del General Gustavo Rojas Pinilla. Durante los agitados
años estudiantiles en la década de 1.970 fue el poeta preferido y su poema
“Porque soy estudiante” marcó idearios y proclamas de libertad estudiantil.
PORQUE SOY ESTUDIANTE
Porque
soy estudiante llevo ahora / la corbata negra y la garganta clara. /
Porque
soy estudiante salí en Junio / a golpear mi voz sobre las armas. /
Porque
soy estudiante sentí un día / un diluvio de fuego en la epidermis.
Entonces
yo creía que era libre / pero la libertad aún se hallaba en ciernes.
Aquel día
los fusiles tendidos le sacaron / astillas al silencio y a los huesos.
Las
arterias abrieron sus caminos / y ángeles negros llegaron desde lejos.
Cayeron
como libros de un estante. / la existencia de muchos camaradas.
Y como
no había cirios, el sol para velarlos/ prendió en la sangre, sus alfas
llamaradas.
Su
período místico dejó bellos poemas dedicados a Jesús el Nazareno. Plegarias y
cuentos poéticos que involucran a Cristo y los seres humanos. Tienen sabor de
tradición oral estos poemas místicos de Alberto Parra Arcila:
PLEGARIA
Vas, Jesús, penando solitario / en tu vía crucis, prolongado y lento / y
en cada corazón para tormento / encuentras, buen Señor, otro Calvario.
Todo hombre es un Judas mercenario / que te vende a Caifás, cada momento
/ y en una cruz eterna sin aliento, / vives muriendo Jesús, por un denario.
Yo, quiero ser tu cruz: sentir clemente / en mis brazos abiertos tus
heridas / y ese nimbo de espinas en la frente.
Y en éxtasis de amor vivir tu calma / para poderte llevar toda una vida /
como un rosal crucificado en mi alma.
De su poesía satírica y chistosa se encuentra
el siguiente poema cuyo estilo de poesía viene seguramente de la influencia del
poeta Cartagenero Luis Carlos “El Tuerto” López. Poesía amable y descriptiva de
los sucesos, personas y sentimientos del ser humano.
REGALAME TUS OJOS
Deliciosa
mujer que eres mi blanco, / mujer de Cadillac en la puerta / y cuenta abierta,
/ en el más prestigioso de los bancos, / te amo y este mi amor por ti / lleva
sus ascuas a todas direcciones.... / te amo con el alma izada / como un ramo de
pascuas.
Deliciosa
mujer de seis millones. / Tú nombre es oro, / pero sobre todo / cuando al pie
de un cheque / lo festonea tú mano de panqueque / y toda tú eres una gracia /
con tú risa amorosa que es un coro / ¡Oh!
Y la encuesta incontestable de tus dientes.
¡Mujer!
/ Deliciosa mujer de Cadillac lujoso / de edificios, haciendas y otras cuentas,
/ se te lee en los ojos la declaración de renta.
¡Ay!
Regálame tus ojos.
Son
varios de sus poemas, delicados y dulces, con una rima armoniosa, placentera,
poesía del amor y la ternura y de las posibilidades difíciles también a las que
nos enfrenta la vida. Las múltiples facetas de este poeta nos llevan como
dijimos en diversos terrenos desde los predios árabes hasta los romances,
descripciones de personajes, místicos de gran belleza, caricaturas y también
escritos en prosa excelentes.
El
siguiente poema nos demuestra la calidad de este poeta y los hermosos versos
trabajados con una métrica y rimas impecables:
JUEGOS DE MARIPOSA
Me pides que
juguemos niña hermosa, / o que entonemos un canto nota a nota. / Juguemos niña,
a la flor que pudorosa / se dejó chupar la miel gota a gota / de una linda y
traviesa mariposa.
Mas el insecto con
las alas rotas / al otro día lo encontró la aurora, / pálido, sin vida,
inmóvil, yerto, / embriagado por esa miel traidora / que lo dejó sobre la copa
muerto.... /
Que sea tu boquita aquella rosa / y yo quiero
ser con embeleso, / el mártir de la flor: la mariposa. / Pon tu boquita linda,
que travieso / quiero libar la miel tan deliciosa / y así morir sobre la flor
de un beso.
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