Y
sonarán las sirenas, desfiles habrá. Muy titinos en
fila india los notables marcharán
y en sus
manitas, llevarán coronas para el día tres junto a Don Heraclio colocar.
Tun, tun los tambores sonarán y bellas niñas la danza marcial animarán.
Confucio, gran filosofo chino (551-479 a. de J.C.) es de advertir que
no era comunista, dijo: “Donde hay educación no hay distinción de clases".
Este señor fundo una escuela de moral y
propendía por la fidelidad a la tradición nacional y familiar.
Pues bien, no conozco ni una sola acta
oficial de fundador o fundadores que
pueda acreditarse con firma, de aquellos o aquel, que lo que fuera la zona
donde nacería el caserío, se fundara el
tres de mayo. En cambio si, quienes como
consta en documento escrito, quienes fueron los de la Junta pobladora. Si existe la primera sería bueno se exhibiera
en sitio público para tenerla entre otras riquezas de la cultura como
patrimonio del hoy pueblo sevillano
otrora San Luis. Quiero conocer aquella, verla.
Diego Luis Córdoba, pensador
y escritor ya contemporáneo
nuestro, escribió: " Por la
ignorancia se desciende a la servidumbre, por la educación se asciende a la
libertad " y después de treinta
mil años como lo dice el ilustre
novelista William Ospina, somos extranjeros
y por ello hemos perdido el rastro de nuestra tradición, que a la postre nació
en Asia, de donde llegaron los primeros emigrantes y no propiamente de la Europa, que con la España guerrerista, colonizadora, religiosa y
esclavizante a los amerindios sometió. No con mas Hidalgos caballeros, ni con
amigos leales como Sancho, sino con el pintoresco mensaje de su lengua castellana, de bellas resonancias en su falsía y piadosas
historietas que negaban la
realidad del indígena, que jamás
se atrevía a irrespetar su tradición.
Otro Tres de Mayo, y como en la canción olvidamos el caminito que encanto al Inca Atahualpa Yupanqui: "Caminito del indio sendero collo, sembrado de piedras. Caminito del indio que junta al valle con las estrellas".
Otro Tres de Mayo, y como en la canción olvidamos el caminito que encanto al Inca Atahualpa Yupanqui: "Caminito del indio sendero collo, sembrado de piedras. Caminito del indio que junta al valle con las estrellas".
Traigo
a cuento este paisaje que tan elocuentemente nos deleita la imaginación al leer el ensayo
de William Ospina en El
Espectador--27 de abril de 2014- , y porque con éste formidable poeta y
novelista Colombiano, orgullo ya también de américa, uno se siente animado a
consignar que no es posible que en tampoco tiempo (1.903 hasta hoy), la
historia se olvide o se tergiverse, máxime, si como en el caso de Sevilla en la Fundación Casa de la Cultura se encuentre guardado en urna de cristal el
diario de uno de los fundadores. Y se pregunta uno: ¿cuándo a los otros
fundadores se les recordara y hará un homenaje?
Y no solo a estos varones sino a
sus esposas que como mujeres de aquellos gigantes también lucharon por construir un
hogar. Hogar y pueblo, que hoy disfrutan muchos de nuestros coterráneos para
alegría de esos primeros habitantes y de
nosotros que aseguramos a la patria
chica querer.
Dijo Gabo: "La historia no es tanto lo
que ocurrió, sino lo que se
escribió".
Con William Ospina digamos: Los pueblos no quieren
opulencia sino dignidad.
- (Aldemar Gómez Oampo.27.IV.2014.Cali).
Imagen, tomada de redes sociales