Muchas personas que nos han llamado para saber más sobre este lamentable hecho, han coincidido en decir que esta es una de las pérdidas más grandes que tiene nuestro municipio, puesto que Julián es hijo de una generación de grandes personalidades, entre los que se cuentan a José de la Cruz Villa Guevara, Álvaro Rodríguez Granada, Nolberto Peláez, Álvaro Ramírez, Ernesto Pino, Iván Reina, Abelardo Giraldo López, Diego Jaramillo Salgado, Fernando Fernández, Olmedo Gómez, entre otros amigos y paisanos que se han destacado por ser líderes en cada una de las áreas en las que se desempeñan.
Paz en su tumba y sincera condolencia a todos sus amigos y familiares
Estoy compungido ante la noticia criminal. Julián Ocampo siempre fue un alumno sobresaliente con brillo propio, no utilizó el valimiento de su padre que era nuestro profesor durante el bachillerato. Comerciante y empresario en el campo de los juegos de azar: honesto y ciudadano ejemplar.
Recuerdo que cuando empezó a organizar el encuentro de egresados creó un enlace y se apoyó en Carlos Alberto Martínez, le dije "lo mejor que puedes hacer es escribirle a Alirio Acevedo y difundir todo a través de "El Ciudadano", así lo hizo". Nos animó para reunir a los egresados de julio 1970, le hicimos caso y lo disfrutamos aquella noche de baile y licor con el otro mono, el mono Iván Reina y el polifacético actor Álvaro Rodríguez, entre otros. Leí el texto de Ernesto Pino, me los imaginé de médicos y los recordé tertuliando, en los descansos de clase. Ernesto hace una semblanza de Julián a partir de la anécdota con la adivina que sintetiza una amistad duradera.
Alberto Ramos Garbiras